Es el procedimiento usado en las pacientes cuyos labios genitales son demasiado grandes y poco estéticos; además de que suelen resultar incómodos con ropas ajustadas o haciendo deportes tales como el ciclismo. Por otro lado, algunas manifiestan dificultad en la penetración sexual, motivo por el cual optan por la Vulvoplastia o Labioplastia de reducción.

Consiste en un procedimiento relativamente simple, que suprime un área de los labios mediante una variedad de incisiones y puede ser realizado con anestesia local. La ubicación precisa de la cicatriz es muy importante para prevenir la retracción de la cicatriz a lo largo del borde de los labios.

La recuperación de la Vulvoplastia requiere un pequeño parche sobre la vulva. Los puntos no se remueven, ya que se utiliza, generalmente, hilos reabsorbibles. En este caso, la recuperación suele ser relativamente rápida; ya que las cicatrices son pequeñas en todos los casos, y con una buena cicatrización de los tejidos de la zona, se vuelven prácticamente imperceptibles en unas semanas. 

Cuando se realiza una Vulvoplastia láser, se ayuda a una pronta recuperación y un mínimo sangrado durante el procedimiento.

Sí, los resultados de la labioplastia son permanentes, sin que queden cicatrices visibles  y con un alto grado de satisfacción de las pacientes.

En general, después del procedimiento se aconseja que exista un periodo de abstinencia sexual de 3 a 5 semanas.

Será cuando disminuya la inflamación y los resultados serán apreciables para la paciente.